domingo, 27 de enero de 2008

¿Monarquia moderna?

Cuando algo huele a alcanfor y naftalina es mejor dejarlo en el armario y cerrar la puerta. Pero hay quien intenta eliminar ese tufillo abriendo la ventana de las nuevas tecnologías. Por intentarlo que no quede, pero claro, no es fácil. Ese regusto rancio y esos colores desgastados por el uso no dan bien ante el potente y luminoso foco de Internet. Si quieres vender un producto caducado, es preferible no enseñarlo mucho, porque si hay 1000 millones de personas mirándolo, seguro que hay alguien que se da cuenta de la fecha de caducidad.
Intentando venderse están las monarquías, sobre todo la más rancia, la británica, que desde hace tres meses tiene un canal en Youtube. Pero no parece que esta nueva herramienta al servicio de su graciosa majestad se haya diseñado desde el conocimiento de la Red. Es más bien un entretenimiento para los monárquicos que han conseguido entender el funcionamiento del ratón. Quizá por aquello de que los británicos cantan el "God Save the Queen" en las grandes ocasiones, Elizabeth Alexandra Mary Windsor no crea que sus asesores tengan que esforzarse mucho en nada para mantenerse en su trono.
"Manolete, si no sabes torear pa que te metes" debe pensar por su parte la Casa Real Española, que siempre se ha mostrado muy tradicional hasta en los divorcios. Con una Página Web van servidos, porque para colgar vídeos como el que se hicieron los Príncipes de Asturias en su casa con sus "churumbeles" no hace falta haber inventado Youtube, con Corazón Corazón les sobra.
Internet se ha desarrollado y se sigue desarrollando a partir de las ideas de unas personas para las que aquello de la sangre azul debe quedarles muy lejos. Y es que son conceptos muy distantes: La monarquía es un ancla e Internet es un motor para la sociedad.
Sólo a través del humor y sabiendo reírse de sí mismos podrán los reyes y familia encontrar en la Red una fuente de simpatías. Si no controlan el lenguaje y las formas de expresión del canal, sólo les queda la risa como lenguaje universal.

jueves, 17 de enero de 2008

"Gallardonistas" y "Esperancistas" online

Tras la decisión del líder del Partido Popular, Mariano Rajoy, de dejar fuera de la lista de candidatos por Madrid al Congreso de los Diputados a Alberto Ruiz Gallardón, y la amenaza de éste último de retirarse de la política, ha saltado a la calle el debate entre partidarios y detractores del alcalde de Madrid. A la calle y a la Red, y uno de los focos más activos en esta polémica ha sido el Facebook del propio Mariano Rajoy (al que no hago un enlace porque hace falta ser usuario registrado para poder visitarlo), como nos cuenta Luz Fernández en su artículo en elpaís.com. En la cuenta del líder del PP en la popular red social, decenas de personas han colgado sus opiniones acerca de la decisión tomada y, aunque los últimos mensajes son de apoyo a Rajoy, una parte importante de los comentarios reflejan la decepción de sus autores porque se decidiera prescindir de Gallardón para el Congreso.

También en Facebook, Diego Antoñanzas de Toledo ha creado un grupo de discusión que, con el nombre de NO SIN Gallardón, pretende agrupar a los simpatizantes más centristas del Partido Popular, para hacer fuerza frente a los postulados más derechistas de la formación política. En su descripción, se critican los manejos de un "Aznar en la sombra" y piden para España "una derecha moderada" que se distancie de la Iglesia, del Opus Dei y de sus antiguos dirigentes.
Dentro de este movimiento de apoyos a Gallardón, aunque con tintes más irónicos centrados en la posibilidad de que Ana Botella llegue a ser alcaldesa de Madrid, se constituye el blog Mariano, ¡recapacita!. En él se vierten opiniones e iniciativas, unas más en serio que otras, para hacer reflexionar al líder Popular, como concentrarse frente la sede del Partido Popular en la calle Génova de Madrid o el envío de e-mails de protesta.
Pero en el lado contrario también hay actividad. Desde los blog GallardónNO.com y Comando Tippex, creados antes de las elecciones municipales de 2007 para mostrar la disconformidad con la política puesta en práctica por el alcalde de Madrid, alaban la decisión tomada por Mariano Rajoy y critican duramente al derrotado en esta contienda, Ruiz Gallardón.
Será interesante seguir la evolución de las iniciativas surgidas sobre esta polémica, aunque de momento, tomando el pulso a los movimientos de las últimas horas, se puede vaticinar que esta decisión, si no va a provocar que el Partido Popular pierda votos, si es posible que impida que los pueda ganar entre los votantes indecisos. Rajoy ha preferido asegurar unos votos que ya tenía antes que abrirse a los votantes que necesitaban algún gesto para acercarse a su partido.